Paz
Sí, puede que todo lo que has vivido este 2020 te reste paz para recibir este 2021, pero no podemos recibir lo nuevo si no sanamos el pasado o soltamos lo que vivimos en él. El 2020 nos enseñó que los planes pueden transformarse de un instante a otro, también descubrimos que Su misericordia se renueva cada mañana y que Él es el mismo Padre que nos cuida sin importar la situación que estemos viviendo.
Recientemente leí un artículo en una revista que habla de una nueva revolución de conciencia que se está gestando en el mundo: cada vez más personas se preocupan por buscar la felicidad y la paz. Por eso vemos esas tendencias que invitan a hacer más ejercicio, a comer más sano y a buscar lo que verdaderamente importa: la familia y Dios.
No sé tú, pero yo disfruto mucho esta temporada. Me agrada el ambiente y el frío. Con todo y el tráfico que hay en todos lados me gusta ver las calles y las casas decoradas con luces y los adornos de Navidad. ¡Cómo no gustarme si todo remite a Jesús! Porque es el tiempo de recordar su nacimiento.